Hasta 1922 aproximadamente, los militares no solo votaban sino que también podían ser electos. Uriburu fue senador por Salta estando en actividad y cuando se discutió la ley del SMO había varios diputados militares, aunque no se si retirados o en actividad. Es una de las razones que se han alegado para que después de la prohibición pasaran a hacer política desde la corporación en los '30, pues se les había negado el derecho individual como ciudadanos. Esto alentó las propuestas en especial de la Fundación Arturo Illia en los '80 para que se reestableciera ese derecho siguiendo el modelo de Alemania que proponía la Fundación Naumann tras las ideas de Von Baudissin. Después Perón extendió en los '50 esa posibilidad para los suboficiales. Obviamente los soldados conscriptos nunca votaron, pues se suponía podían ser influenciados por sus mandos. La ley 19.101 sólo confirmó la situación vigente.
Luis Tibiletti