VI CONFERENCIA DE MINISTROS DE DEFENSA DE LAS AMÉRICAS

Quito, Ecuador
del 16 al 21 de noviembre de 2004


República de Haití. Discurso del Sr. Bernard H. Gousse Ministro de Justicia y Seguridad Pública

Señor Ministro de Defensa del Ecuador
Señoras y Señores Ministros de Defensa del Continente
Señoritas, Señoras, Señores

Permítanme antes de comenzar, el agradecer y felicitar al gobierno del Ecuador, y especialmente a sus Fuerzas Armadas, por la calidad y calidez de la acogida que nos ha reservado. La hospitalidad del Ecuador con respecto a sus vecinos predice aquello que será la cooperación continental en materia de seguridad.

En efecto, nuestros países, con la notable excepción de Costa Rica, Panamá y más recientemente de Haití, mantienen fuerzas militares cuando casi habían desaparecido las amenazas eventuales procedentes de vecinos. La codicia dirigida a un territorio o de los recursos naturales se apaga por la puesta en sitio y el desarrollo de reagrupamientos económicos regionales así como continentales. Las nuevas amenazas a la estabilidad de nuestro continente constituyen nuevos desafíos para los gobiernos de la región.

Algunas de estas amenaces provienen de la persistencia de inigualdades sociales en nuestros países. La pobreza absoluta genera la desesperación que impulsa a millares de personas a los caminos de la inmigración clandestina y a que caigan en las garras de los criminales del tráfico ilícito de personas. El cultivo de la droga continuará siendo una solución para los campesinos en tanto que el precio de los otros cultivos legales (café, cacao, etc.) continúe cayendo. Lamentablemente, los organizadores de esta industria tienen frecuentemente secuestrado al aparato estatal y no dudan en atacar y destruir a los funcionarios judiciales, policiales o militares que se enfrentan a su macabra empresa. Para sostener y proteger estas actividades que amenazan algunas veces la existencia misma del Estado dentro de sus funciones reales, sus promotores se involucran en la banda contraria de armas de fuego. Otras amenazas provienen del exterior y pueden beneficiarse de la debilidad de nuestras estructuras portuarias y aeroportuarias para llevarla muerte a los grandes centros urbanos de América del Norte.

Estas nuevas amenazas se caracterizan por su carácter transnacional cuando nuestros reflejos raramente sobrepasan el horizonte de nuestras fronteras terrestres. Consecuentemente, nosotros debemos reflexionar cada vez más de manera transnacional sobre la elaboración de políticas hemisféricas y la integración o por lo menos la cooperación operativa de nuestras fuerzas de seguridad.
Sin embargo, nosotros debemos enfatizar y subrayar fuertemente que la respuesta a estas amenazas no puede ser únicamente policial o militar. Las balas exacerban en lugar de calmar las frustraciones y la cólera que se origina en el hambre, la ausencia de educación y las infraestructuras sanitarias. La construcción de caserones no resuelve el empobrecimiento originado e n el deterioro d e los términos de intercambio.

La República de Haití en el pasado contribuyó militarmente ala desaparición de la esclavitud dentro de varios países del continente. Hoy en día, en aplicación de una resolución de la ONU, contingentes llegados de Chile, Argentina, Uruguay, Guatemala, Ecuador, Canadá y principalmente del Brasil, participan en Haití en una misión dirigida a restablecerla seguridad. Es la primera vez que un grupo de países americanos participan conjuntamente en este tipo de intervención a favor de uno de sus vecinos. El gobierno Haitiano formará parte en el curso de las discusiones dirigidas a este tema con sus observaciones sobre los éxitos y debilidades de la operación realizada en su suelo, y de sus recomendaciones para el logro de las operaciones futuras.

Frente a un nuevo género de amenazas, la República de Haití considera necesaria la implicación de cada país de la región dentro de los mecanismos regionales de seguridad. De todos modos, la estrategia hemisférica deberá, para su puesta en escena, tanto a nivel multilateral como bilateral, integrar las características específicas nacionales.

I. La implicación de Haití dentro de los mecanismos regionales de seguridad

La República de Haití, miembro fundador de la OEA, no ha dejado nunca de participaren el pasado en los convenios multilaterales que se han establecido para la seguridad regional. El Acuerdo de Punta del Este ha sido ratificado por Haití. Pero entonces se trataba de luchar contra una doctrina actualmente desaparecida. Actualmente Haití tiene la ventaja d e estar presente e n los debates sobre la seguridad del continente.

Ella hace suya la Declaración sobre la Seguridad en las Americas, adoptada el 28 de Octubre del 2003. Ella se prepara a ratificar
La integración de Haití dentro de los mecanismos de concertación previstos en estas convenciones le permitirá unir su voz a la reflexión y alas acciones colectivas.

II. La consideración necesaria de las características específicas nacionales dentro de los mecanismos regionales de seguridad.

El Gobierno d e la República d e Haití constituye el claro ejemplo de que el desconocimiento de las realidades nacionales puede hacer fracasar los objetivos de seguridad hemisférica.

Los Estados Unidos de América están dotados de mejores medios policiales y tecnológicos para limitar el acceso a sus fronteras, de los terroristas llegados del exterior. Sin embargo, el punto débil se sitúa dentro de los aeropuertos de los países periféricos como Haití, que en ausencia de una fuerte cooperación con las autoridades representan los pasos por donde se infiltra el mal.

La pobreza absoluta engendra, ya lo dije, la emigración clandestina. Los balseros amenaza la seguridad, el equilibrio demográfico y la estabilidad económica de las naciones vecinas. Los jóvenes sin porvenir, los padres sin futuro profesional engrosan los grupos de delincuentes, de toxicómanos y de traficantes de drogas en el interior. El desarrollo y la creación de empleos participan, entonces, d e la lucha por la seguridad regional. En consecuencia, es necesario que la Cámara de Representantes de los Estados Unidos adopte la Ley Hero, tal como fue votada por el Senado. Este texto permitirá la creación inmediata d e Cien Mil empleos directos dentro del sector del sub tratamiento añadido a las Veinte y Cinco Mil existentes actualmente. Si por el contrario la versión de la Cámara, inadecuadamente denominada Hope prevaleciera, solamente se crearán Quince Mil empleos. Voy a ser claro y brutal, la diferencia son Setenta y Cinco Mil posibles balseros, futuros delincuentes y traficantes de todos los géneros.

Haití desea desarrollar con su vecina, la República Dominicana, una cooperación hacia el intercambio de información y de acciones comunes para evitar que el tráfico de vehículos robados y de personas, a menudo menores de edad, se efectúe dentro de los dos sentidos de cada costa de la frontera.

En fin, si se quiere, como la demanda de una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU de que se ponga fin a las actividades de terroristas y otras bandas armadas que siembran el duelo desde hace meses entre la población civil y que se toman la fuerza pública, el gobierno haitiano debe tomar las medidas para equipar adecuadamente a sus policías. Los obstáculos ala adquisición legal de armas son además demasiado numerosas ya que los terroristas se aprovisionan libremente en el mercado negro.
El gobierno de la República de Haití les agradece la oportunidad que le ha sido brindada de compartir sus reflexiones acerca de la seguridad continental. Desea que los encuentros bilaterales y los trabajos de las comisiones den como resultados frutos ala altura de los nuevos desafíos.